Hemos constituido una Comisión de Comedor, con representantes del AMPA, el claustro y el equipo directivo del centro, para revisar el menú del comedor escolar y fomentar la participación de la comunidad en una alimentación más saludable y sostenible. Tras un par de sesiones de formación iniciales, el menú revisado para el curso 2017/18 se caracteriza por:
- Fomentar el consumo de vegetales de temporada, e ingredientes de origen estatal.
- Incrementar progresivamente el uso de ingredientes de producción ecológica certificada.
- Moderar el consumo de ingredientes de origen animal, siguiendo estrictas recomendaciones nutricionales y consideraciones medioambientales. Hemos introducido en el menú el “Día más sostenible”, en el que el menú, perfectamente equilibrado, prescinde de carne, huevo o pescado. ¡¡Y es cada vez más informes nos alertan de las graves implicaciones de la ganadería y piscicultura intensivas!!
- Reducir el consumo de fritos y alimentos procesados.
Además, hemos organizado algunas sesiones informativas para familias y plantilla del centro, así como talleres a todo nuestro alumnado, siguiendo la guía pedagógica Alimentando otros modelos. Y tenemos pendiente organizar otras actividades de sensibilización y formación para familias y plantilla, pues desde las primeras propuestas de cambio y acciones se han generado debates. La alimentación nos mueve… ¡de qué manera!
También expusimos los paneles Alimentar el cambio en abril, hemos pasado una encuesta dirigida a las familias, alumnado y trabajadores/as del centro, e iniciado una nueva sección de alimentación en la página web del centro.
Por último, con el objetivo de facilitar la llegada de algunos de estos cambios a los hogares de nuestra comunidad, hemos constituido un grupo de consumo formado por familiares y trabajadores/as, que en breve organizarán conjuntamente la compra de productos ecológicos. Así reducimos los intermediarios entre productores/as y consumidores/as, con el objetivo de acceder a precios asequibles y de fortalecer la actividad de los grupos de familias y de los/as productores/as. Nos parece además una medida de conciliación familiar muy importante para quienes llevamos años participando en iniciativas de este tipo, pues se facilita la realización de una parte significativa de la compra en la escuela.
Estamos en nuestro primer año de andadura agroecológica y sabemos que aún tenemos por delante mucho trabajo, como formaciones al personal de cocina y comedor para mejorar la aceptación de las innovaciones del menú, generar nuevas oportunidades de intercambio, aprendizaje y sensibilización con familiares y plantilla, fomentar su participación en la mejor continua del proceso, etc.
Por lo que nos cuentan, este tipo de procesos tienen unos inicios complicados: los cambios siempre cuestan ¡ y más si nos tocan algunos de nuestros platos favoritos! Pero las motivaciones no pueden ser mejores: insistiremos, seguiremos explicando y haciendo las cosas lo mejor que podamos. Estamos decidios/as a devolver al menú alimentos con mayor sabor, valor nutritivo, garantías para la salud y efectos socioambientales positivos. Y aprovechar así el gran recurso pedagógico que es el acto de comer… ¡que tanto nos gusta!
Comisión de Comedor del C.E. Ponce de León.
Noviembre de 2017