Garúa participa en el proceso de mejora de la alimentación de esta comunidad educativa mediante asesoramiento técnico y actividades de sensibilización, como parte del proyecto Alimenta futuro.

A lo largo de 2024, hemos tenido el privilegio de colaborar con la Escuela Infantil San Fermín, una de los pocos centros públicos del distrito madrileño de Usera con los que no habíamos trabajado hasta la fecha. Dentro del proyecto Alimenta Futuro, que desarrollamos en colaboración con la Fundación Fomento Hispania, hemos apoyado la apuesta firme de la dirección por fomentar hábitos alimentarios saludables y sostenibles entre su alumnado, familias y trabajadoras. Una apuesta presente en cada vez más escuelas, reflejo de su compromiso con el bienestar infantil y el cuidado del medio ambiente, elementos fundamentales en la construcción de un futuro más justo y saludable.

Un proyecto con visión integral

Arrancamos en marzo con una reunión con el grupo motor de alimentación de la escuela, estableciendo los objetivos y la planificación del año. A lo largo de los siguientes meses, hemos mantenido una coordinación constante para asegurar que cada actividad respondiera a las necesidades específicas del centro y de su comunidad.

Las actividades dirigidas a todos los actores clave de la escuela han sido:

1. Talleres de sensibilización para el personal de la escuela: Los equipos docente y no docente participaron en sesiones diseñadas para aumentar su conocimiento y motivación a favor de una alimentación más saludable y sostenible. Además de trasladar sus beneficios y compartir algunas herramientas prácticas desarrolladas en nuestro trabajo previo con decenas de escuelas 0-3 años, las sesiones fomentaron una reflexión colectiva sobre la importancia de su rol como modelos en la alimentación infantil.
2. Taller práctico de meriendas saludables, en el que gracias a la complicidad de la plantilla de la escuela, 13 peques (¡del grupo de “mayores”!) disfrutaron junto a sus las familias de una apetitosa merienda muy nutritiva, sencilla y económica. Ellos y ellas eligieron, aplastaron, mezclaron, saborearon…, pudiendo elegir entre sabrosas frutas de temporada y patés vegetales, demostrando que una alimentación saludable y sostenible puede integrarse fácilmente en la rutina diaria, incluso en contextos con recursos económicos limitados.
3. Conversatorio con familias, integrado en una jornada de puertas abiertas del huerto escolar, también con… ¡super-merienda preparada por el personal del centro! En el taller compartimos ideas clave sobre alimentación sostenible, destacando el impacto positivo del consumo de vegetales de temporada, legumbres y productos ecológicos. Las familias de la escuela pueden participar en su huerto todos los jueves por la tarde (y si ese día no va bien, la escuela hace lo posible por ofrecer alternativas).
4. Visita al huerto comunitario agroecológico de San Fermín: Situado a 15 minutos de la escuela, este espacio se convirtió en un aula al aire libre donde tanto peques como madres y padres pudieron conectar con la importancia y belleza de los espacios agro-urbanos que cuidan de la biodiversidad, del vecindario y de sus relaciones. Fue un espacio privilegiado para entender algunas claves de los procesos de producción de alimentos, comprendiendo mejor la relación entre lo que comemos y el medio ambiente.

La importancia de una alimentación saludable desde la primera infancia

Establecer hábitos alimentarios saludables desde los primeros años de vida es esencial para el desarrollo físico y cognitivo de niños y niñas. En el caso de barrios con más dificultades, como muchas de las comunidades de Usera o Villaverde, este trabajo adquiere una dimensión aún más importante. Una alimentación equilibrada no solo previene problemas de salud como la obesidad infantil o deficiencias nutricionales, sino que también contribuye al rendimiento escolar y al bienestar emocional.

Además, sensibilizar a las familias y trabajadoras de la escuela sobre estos temas asegura un entorno coherente donde niños y niñas puedan aprender e incorporar estos hábitos de forma natural. La implicación de todos los agentes educativos es clave para el éxito a largo plazo de estas iniciativas.

Beneficios para el medio ambiente y la sostenibilidad

El impacto positivo de una alimentación sostenible trasciende el ámbito individual. La Escuela Infantil San Fermín viene trabajando durante todo el año en la mejora de sus menús: mayor presencia de vegetales de temporada y legumbres, reducción de la presencia del azúcar, eliminación de alimentos procesados e introducción progresiva de algunos productos ecológicos, reduciendo así la huella de carbono asociada a la producción de alimentos. Este enfoque también fomenta sistemas alimentarios más justos y resilientes, fundamentales para afrontar los retos ambientales y sociales actuales.

Por otra parte, la escuela está apostando por integrar la sostenibilidad en su proyecto educativo, animando a su Comunidad a tomar decisiones más conscientes. Con cada taller, cada visita al huerto y cada receta compartida, plantamos semillas de cambio que, estamos seguros, seguirán creciendo en los años por venir.

El compromiso de la Escuela Infantil San Fermín con la salud y la sostenibilidad es un ejemplo inspirador de cómo las instituciones educativas pueden convertirse en motores de cambio social. Este 2024 ha sido solo el comienzo, y esperamos que esta experiencia sirva como modelo para otras escuelas que deseen apostar por un enfoque integral en la educación alimentaria.

Junt@s, alimentamos un futuro más saludable y sostenible para tod@s.