El pasado mes de julio, Baltimore (en Maryland, Estados Unidos), se convirtió en la ciudad más grande del mundo en establecer una prohibición a la venta de bebidas azucaradas y refrescos a los niños. Los establecimientos comerciales que no respeten esta nueva ley, tendrán que pagar una multa de 100 dólares.
De acuerdo a Leana Wen, responsable del comisionado de salud de Baltimore, “la ley, denominada ‘Bebidas saludables en los menús infantiles’, obliga a los restaurantes a servir solo leche, agua y jugos 100% de fruta natural a los niños, debido a que distintos estudios científicos han demostrado que uno de los grandes contribuidores a la obesidad infantil es el consumo de bebidas azucaradas“. Wen indicó que la legislación “ayudará a los padres a tomar la decisión más saludable y fácil“.
La responsable de impulsar esta ley también dijo que no espera que los restaurantes cambien sus menús de la noche a la mañana para adaptarse a esta, pero que espera que comiencen a respetarla inmediatamente, negándose a servir refrescos a los niños y padres que los soliciten. “Los dueños tienen que poner al menos algo que indique que los menús han cambiado. Algunos restaurantes tendrán que imprimir nuevas cartas. Los cambios en los menús en línea serán fáciles,” dijo en un comunicado Leana Wen.
De acuerdo a cifras del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos, uno de cada tres niños en edad escolar en Baltimore es obeso, por lo que la nueva Ley está más que justificada, según expertos en el tema. “Uno de cada cuatro menores de edad consume refrescos todos los días. El número de niños con obesidad en Estados Unidos se ha triplicado desde la década de los setenta,” indican cifras de este organismo”.
La prohibición, sin embargo, ha provocado rechazo entre algunos restaurantes que creen que hará que su ventas disminuyan considerablemente. No obstante las quejas de algunos, la nueva ley obligará a todos a evitar que los menores de edad consuman refrescos y bebidas azucaradas, les guste o no.
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