Te presentamos un decálogo de seguridad e higiene para cocinar con tus hijos e hijas, reduciendo al máximo los riesgos, mientras disfrutáis junt@s de experiencias muy fructíferas para una buena educación alimentaria

Cocinar es uno de los elementos más importantes para una alimentación saludable, sostenible, y económica. Con ello reducimos el uso de ultraprocesados (repletos de azúcares, sales y/o grasas poco saludables; además de cajas, plásticos y otros residuos), podemos comer requetebién con un presupuesto moderado, y tendremos la oportunidad de utilizar alimentos de temporada, proximidad, ecológicos, etc.

Cocinar con peques será, además, divertido (¡para ell@s y para ti!) y muy educativo. Sabemos que no es fácil, y precisamente por eso, no podremos hacerlo todos los días. Requiere tiempo que muchas veces no tenemos, y poder dedicar una parte de nuestra demandada “cabeza” a pensar qué cocinar, hacer la compra, etc. Pero… ¿qué tal probar algún fin de semana? ¿y una cena a la semana?

Será un tiempo estupendo compartido con tus hijos e hijas. Ajústalo a tu disponibilidad e inténtalo: ¡Merecerá la pena! Para empezar, conseguirás que prueben ingredientes… ¡impensables!

Cocinar con peques, con higiene y seguridad

La cocina es además una excelente herramienta pedagógica para las diferentes competencias que se trabajan en escuelas y colegios. Y como tal, desde Alimenta Futuro -proyecto que desarrollamos en colaboración con la Fundación Fomento Hispania-, volvemos a la carga con nuestros GastroLABs: talleres de cocina sostenible y saludable que este curso vamos a desarrollar en varios colegios de Usera y Villaverde, pero también en colaboración con la ONG Manos solidarias de Leganés.

A continuación os resumimos nuestro Decálogo para cocinar con niñ@s con higiene y seguridad. ¡Que lo disfrutéis!

1. Lavado de manos

Antes de empezar a cocinar, es esencial que todos se laven las manos con agua y jabón…¡con ganas!. Esto ayuda a eliminar gérmenes y bacterias que pueden contaminar los alimentos. Recuerda que deben lavarse las manos:

  • Antes de manipular cualquier alimento.
  • Después de ir al baño.
  • Después de tocar mascotas.
  • Después de manipular basura.

Para secarlas, utilizaremos un paño distinto al que utilizamos para limpiar la encimera o superficie de trabajo.

2. Mejor con delantal, pelo recogido y gorro

Si lavarse las manos y recogerse los pelos largos es una de las rutinas imprescindibles, la ceremonia de ponerse un delantal y gorro de Chef ayudará a despertar la motivación de l@s peques (además de mantener ropas y pelo limpios de salpicaduras).

No es necesario comprarlos. En internet encontrarás un montón de tutoriales para fabricarlos y personalizarlos en casa. Aquí podéis encontrar diversas ideas para gorros y delantales personalizados.

Además, arremangamos las mangas largas para que ni molesten ni se ensucien.

3. Uso de utensilios

La cocina para los niños es un lugar de experimentación en el que desarrollar habilidades, pero el proceso de aprendizaje puede tener algunos peligros.

  • Cuchillos: Asegúrate de que los niños utilicen cuchillos apropiados para su edad, y con la supervisión de una persona adulta. Pueden empezar con un cuchillo de plástico duro (o metálico de mesa, sin filo) para untar o cortar alimentos blandos. El uso de cuchillos afilados para alimentos más duros debe ser siempre con la supervisión de una persona adulta. Puedes colocar tu mano sobre la suya, por ejemplo. Enséñales a cortar alejando la cuchilla de su cuerpo y a mantener los dedos lejos del filo. También podéis adquirir un protector de dedos. Al ver que les dejáis usar los cuchillos, ganarán confianza en si mismos.
  • Tabla de cortar: Por muy fácil que parezca el corte que tenemos que hacer, siempre debemos hacerlo sobre una tabla, jamás sobre la mano. También es importante asegurarse de que la tabla está sobre una superficie estable, lejos de los bordes de la mesa o encimera.
  • Peladores y ralladores: Son utensilios muy útiles para emplear hortalizas y frutas, en cantidad y en variedad, reduciendo el uso de cuchillos. A la hora de elegir los modelos, prioriza aquellos más fáciles de agarrar (¡recuerda que su mano es más pequeña que la tuya, y puede aplicar menos fuerza!), y ralladores que se puedan apoyar sobre la tabla o encimera. Como con los cuchillos, ¡muy importante mantener los dedos lejos de las zonas afiladas! Por cierto, algunas frutas y verduras ecológicas, al no haberles aplicado pesticidas, pueden consumirse sin pelarse, siempre que se laven bien al chorro asegurándose de no dejar restos de tierra (pueden usarse cepillos). Será el caso de manzanas y peras, frutas de hueso, zanahorias, etc.

4. Uso de electrodomésticos

Batidoras y procesadores solo deben usarse bajo la supervisión de una persona adulta. Antes de utilizarlos debemos asegurarnos de tener las manos secas (¡son aparatos eléctricos!), y es muy importante desenchufarlos en cuanto dejemos de usarlos. Aunque muchos de los equipos vienen dotados de dispositivos de seguridad, nunca deben introducirse las manos dentro de los equipos mientras están encendidos.

5. Prevención de quemaduras

Siempre que utilicéis calor, es necesaria la presencia de una persona adulta.

  • Sartenes y ollas: coger siempre por los mangos y evitar que estos sobresalgan del borde de la cocina, para prevenir vuelcos accidentales.
  • Cuidado con el horno: utiliza siempre guantes de cocina para sacar bandejas del horno. No olvides abrir la puerta del horno con cuidado, inclinándote hacia atrás para evitar el calor.
  • Microondas: algunos recipientes pueden calentarse mucho, por lo que conviene usar guantes o paños. El contacto de alimentos calientes con plásticos no es nada recomendable, por lo que mejor utiliza aquellos recipientes (cristal, cerámicos, silicona) que hayas comprobado que se calientan menos.

6. Manipulación de alimentos y alergias

Separar los alimentos crudos de los cocidos ayuda a evitar la contaminación cruzada por microorganismos. Una opción es usar tablas de cortar diferentes para carnes o pescados que para verduras y frutas.

En el caso de alergias (común en muchas familias, y sobre todo, en actividades con grupos de niñ@s), es imprescindible mantener separados aquellos alimentos para los que hay alguna persona alérgica (y los utensilios y superficies que usamos en su manipulación y elaboración), del resto de alimentos.

Explícales la importancia de mantener los alimentos perecederos en el refrigerador y no dejarlos fuera por más de dos horas.

7. Limpieza durante y después de cocinar.

  • Superficies limpias: Antes de empezar a cocinar, limpia bien las superficies de trabajo con jabón y una bayeta limpia.
  • Recoger mientras cocinas: Anima a los niños y niñas a limpiar mientras cocinan, recogiendo utensilios y ingredientes para evitar un desorden mayor al finalizar. Si se produce un derrame, hay que limpiarlo inmediatamente, preferentemente con papel de cocina o un estropajo que aclararemos a continuación. Después de usar los utensilios, se deben lavar con agua caliente y jabón, o ponerlos en el lavavajillas.

8. Cualquier corte o rasguño debe cubrirse con una tirita.

Esto evitará que pueda nuestra herida pueda infectarse, o simplemente que nos escueza al contacto con algún alimento. A la vez evitará que se propague cualquier bacteria de nuestro organismo a los alimentos que vamos a cocinar.

Y recuerda que un pequeño corte o arañazo no es un drama: al jugar, correr, saltar, etc. niños y niñas se caen, hacen heridas, rasguños… y no por ello les prohibimos estas actividades, que tanto disfrutan y que son imprescindibles para su desarrollo.

9. Estar siempre atentos.

Insiste a los niños y niñas en que presten toda tu atención en lo que están haciendo: el resultado será mejor, disfrutaremos más del proceso y reduciremos el riesgo de accidentes (olvidos, tropiezos, derrames, etc.). Además de nuestra supervisión directa con los utensilios o elaboraciones que lo requieran, anima a los y las peques a pedir ayuda si se sienten inseguros sobre algún paso del proceso.

10. Probar… sin hacer el guarrete.

Pelar y cortar una hortaliza, mezclar varios ingredientes, montar una salsa… ¡da muchísimas ganas de probar cualquier alimento entre tus manos! Y al fin y al cabo, este uno de los objetivos principales de cocinar con niños y niñas: que se familiaricen y disfruten de alimentos y elaboraciones saludables.

Por lo tanto, no podemos decirle a un/a peque que no puede probar aquel alimento (seguro) que está manipulando. Ha de hacerlo, eso sí, con un cubierto limpio diferente al que venía usando, y lavándose las manos si se las ha llevado a la boca.

Cocinar es una experiencia enriquecedora que fomenta la independencia y la responsabilidad en los niños y niñas. Siguiendo estas normas básicas de seguridad e higiene, disfrutaréis de esta actividad de manera segura y saludable. Comparte esta información con ellos y conviértelo en un momento divertido y educativo en familia. ¡A cocinar!