Nos hacemos eco de esta noticia de publico.es: “Una veintena de colegios gallegos tienen que recurrir a pizzas y bocatas de encargo para dar de comer a sus alumnos”, porque nos parece muy reveladora del absurdo al que se puede llegar por no tener una cocina in situ en los centros escolares y por hacer una mala gestión de los comedores escolares.

El mencionado artículo recoge que el comienzo del curso escolar en Galicia se vio alterado por las protestas en varios colegios por la falta de profesorado y también porque una veintena de centros de zonas rurales de la comunidad tuvieron que recurrir a los servicios de comida a domicilio, o a restaurantes y a establecimientos locales, para cubrir las necesidades del alumnado a la hora de comer, ante la falta de alimentos disponibles para preparar el almuerzo.

La Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, que dirige Román Rodríguez, responsabilizó a la empresa subcontratada para ello, el catering Gescor, con sede en Salamanca, a la que ya multó el año pasado con 17.000 euros por deficiencias en la prestación de un servicio que, sin embargo, sigue manteniendo.

Esta compañía tiene la concesión para el suministro de comida elaborada, o de las materias necesarias para prepararla, en más de un centenar de centros de Galicia. Tanto las asociaciones de padres y madres de alumnos, como los sindicatos, denuncian hace años numerosas deficiencias, como la no provisión de comidas ya preparadas y de materias primas, de menaje, frigoríficos y lavaplatos, problemas en los repartos, impagos a los proveedores y a los trabajadores, o falta de personal para el cuidado y vigilancia de los comedores.

Según la Confederación Intersindical Galega (CIG), el sindicato mayoritario en Galicia, estos problemas se han repetido al iniciarse este curso, obligando a los profesores a comprar empanadas, pizzas y bocadillos para dar de comer a los alumnos. Insta a la Xunta a que asuma directamente la gestión del servicio y considera indignante que el Gobierno de Feijóo incluso haya respondido a los directores de algunos colegios que compren ellos el pan en el caso de que la empresa encargada no lo facilite.

Esta situación se debe a que no todos los colegios de las zonas rurales de Galicia tienen cocinas propias en uso, lo que obliga a que las comidas de muchos se elaboren en otros centros para ser transportadas al resto. Algunos de esos colegios están a varias decenas de kilómetros de distancia con malas comunicaciones por carretera.

La Federación de AMPA de Ourense ha sido uno de los agentes más activos en la defensa de una alimentación escolar de calidad y la promoción de hábitos saludables. En poco tiempo, los centros educativos de la provincia han ido perdiendo sus cocinas, y con ello un modelo que favorecía el desarrollo local y que, sobre todo, formaba parte del proceso educativo. Ante esta situación, FAPA Ourense se ha implicado en la gestión del servicio de comedor de 11 centros que, careciendo de cocinas, prestan servicio de comedor a 1.100 estudiantes.

La Federación exige a las empresas proveedoras una serie de requisitos cuyo cumplimiento es obligatorio. Por un lado, la cocina central está a un máximo de 20 minutos del colegio más lejano a la misma. Por otro, todo el producto debe ser fresco, de temporada y de primera calidad, comprándose a empresas locales. En 2018 se ha introducido pan de fermentación lenta y harinas sin refinar. Para supervisar diariamente la materia prima y el propio servicio, tanto en la cocina central como en cada centro, FAPA Ourense cuenta con dos figuras propias. Por otra parte, editó en 2017 un libro destinado a las familias usuarias, con información sobre las cualidades nutricionales y las pautas de consumo seguidas en los menús de sus comedores.

Uno de los más afectados, y que recoge el artículo de publico.es, fue el Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Celso Emilio Ferreiro, de A Silva, en la localidad coruñesa de Cerceda, donde además de para su comedor, se elaboran almuerzos para más de 300 niños y niñas de otros cinco centros de la comarca. El CEIP de A Silva no recibió los alimentos para preparar las comidas y, aunque contaba con un pequeño remanente de materia prima, sólo le permitió cubrir las necesidades de sus propios escolares. En los otros cinco centros hubo que recurrir a la comida rápida para poder alimentar al alumnado.

Esa misma semana se produjeron situaciones similares también «insostenibles», según la CIG, en el IES Fonmiña de A Pastoriza, en Lugo, que también prepara la comida para el IES Enrique Muruais, de A Pontenova, y que sólo disponía de alimentos para elaborar uno de los dos platos del menú. En el IES Basanta Silva, de Vilalba llevan dos días sin recibir nada, sin frigorífico y sin cuidadores para el comedor.

Según la CIG, hay algunos colegios donde, ante la previsión de que se agoten los alimentos, la Xunta, a través de su Delegación Territorial, ha llegado a instar a las respectivas direcciones a que “se busquen la vida” y los compren en las tiendas y comercios locales, como en el IES de Becerreá, del Centro Público Integrado —CPI, con alumnos de entre 3 y 16 años— Uxío Novoneyra, de Pedrafita do Cenbreiro, y del IES Lamas de Quendas de esa misma localidad, todos en Os Ancares lucenses.

El secretario nacional de CIG-Ensino, Xesús Vermello, exigió a la Xunta que resuelva esos problemas para que los niños y niñas tengan garantizada su comida en condiciones óptimas y con el personal necesario para su cuidado». También reclamó al Gobierno de Feijóo que retire la concesión a Gescor, y recordó que su sindicato siempre ha defendido que los comedores escolares y el transporte escolar son dos servicios públicos más dentro del servicio educativo que presta la Administración y que, por tanto, así deben ser tratados.

El artículo recogía que la Consellería de Educación confirmó que tiene constancia de lo que denomina como «incidencias», y aseguró que ha transmitido la necesidad de solventarlas a los responsables de Gesccor, a quienes ha informado de que se tomarán las medidas pertinentes de acuerdo con los pliegos de contratación y con la Ley de Contratos del Sector Público.

Enlace original: https://www.publico.es/sociedad/educacion-publica-veintena-colegios-gallegos-recurrir-pizzas-bocatas-encargo-dar-comer-alumnos.html

Link FAPA Ourense: https://fapaourense.es/comedores/